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Fecha: 28-30 de abril de 2010
Lugar : Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. Madrid.
Seminario: Edificio Nouvel, Auditorio 200
Taller: Edificio Nouvel, Centro de Estudios
Hora: Seminario, 19.30 . Taller, 17.30
Entrada: Seminario: Gratuita, hasta completar aforo
Taller: Necesaria inscripción.
Coordinación: Fefa Vila y Begoña Pernas
La palabra “cultura” o “lo cultural” señala diferentes procesos y actividades cuya definición varía dependiendo de las esferas en las que se la inserta: el mundo de la vida cotidiana, las tradiciones artísticas y literarias o las políticas institucionales y de mercado. Todas estas dimensiones de la palabra “cultura”, la creación y transmisión de valores y su realidad tangible, se mezclan o se contraponen polémicamente en los análisis de cómo se expresan los imaginarios simbólicos o cómo se construyen los mercados de trabajo y de productos que generan. El planteamiento de este seminario es colocar el acento en una mirada compleja sobre la producción cultural, la proporcionada por el feminismo.
Durante el pasado siglo, desde el movimiento sufragista o a través de los primeros textos de Virginia Woolf o Simone de Beauvoir, el feminismo inicia su andadura no sólo como un movimiento social o una teoría crítica de lo político y económico, sino también como una crítica profunda a las estructuras culturales y de producción de un sistema social dominante, al que nombrará como patriarcal. Desde este origen, las perspectivas de género suponen un enriquecimiento de los análisis sociales, en cuanto que sitúan su interés en una cuestión presente pero carente de reflexión. Las teorías feministas ponen de relieve la importancia de estas diferencias y, con el concepto de género, encuentran un poderoso artefacto para hacerlo sin aceptar apriorísticamente la inamovilidad de las mismas. Los estudios feministas se han dedicado a probar desde su comienzo que estas características no derivan de la biología, sino que son construidas y redefinidas históricamente. La creatividad y capacidad crítica de esta visión permite reinterpretar las ciencias sociales y naturales, pero también elevar a la esfera teórica temas que antes estaban relegados y deslegitimados como asuntos menores. Allá donde se mire, la crítica feminista a los modos de producción cultural toca muchos de sus conceptos considerados laterales, pero también normativos y fundacionales: sus temáticas y sus protagonistas, pero también la autoridad, el reparto del tiempo y del dinero, las fronteras entre lo que es arte y cultura y lo que no lo es, la definición de la autoría.
Estos análisis se hacen especialmente relevantes a partir de la década de los noventa con el desarrollo crítico que introducen las teóricas feministas, tanto en la teoría económica como en la sociología y filosofía del conocimiento, con Sandra Harding, Helen Longino, Julie A. Nelson, Donna Haraway entre otras muchas teóricas, así como desde los estudios culturales y queer con Eve Kosofsky Sedgwick, Teresa de Lauretis, Judith Butler o la propia Isabell Lorey, invitada en una de las sesiones.
La intención de este seminario es introducir la crítica feminista a través del análisis de la producción cultural, situándonos en la realidad de un país industrialmente periférico, analizando con la ayuda de mujeres que viven y trabajan en la industria cultural algunos temas básicos: los límites (cada vez más difusos) de lo que es cultura y arte; la organización del trabajo “cultural”, “Intelectual”, o “artístico” convertido en imagen y promesa del mundo del trabajo actual, la posición secundaria y precaria de las mujeres en esta industria que, como todas, tiene sus corporaciones, sus pymes y sus trabajos subalternos, la existencia de clases “culturales”, las representaciones hegemónicas de los sexos y de las relaciones que la producción cultural selecciona y transmite y, por último, las experiencias de vida y trabajo que abren perspectivas nuevas sobre cómo sobrevivir materialmente y a la vez discutir ideológicamente un mercado cuya fuerza es su misma desinstitucionalización y fragmentación.
Este seminario y taller trata de revertir el sentido dominante sobre la producción cultural a través de la crítica feminista y los procesos que conforman la clase de creadores y, sobre todo, la de aquellos que ocupan un espacio central en el intercambio de valores culturales. Lejos de ser una excepción, la crítica feminista explica que la actividad artística y cultural, en el ámbito de la construcción de las relaciones sociales de género y de poder, responde a lógicas o a “intuiciones” conservadoras que actúan reorganizando el trabajo artístico y la producción de valor simbólico a partir de postulados neoliberales de negocio y eficiencia económica, así como criterios implícitos o explícitos de excelencia masculina.
En el cruce de la crítica cultural, la sociología, la economía, la política y el feminismo, algunos de los temas más notables se organizarán en torno a una serie de cuestiones guiadas por el hilo común de la lógica cultural en el capitalismo tardío y el contexto de crisis y de la reorganización del capital global actual. Esta crisis actúa de dos formas: es un tema en sí misma, con interés interpretativo y práctico. Pero, al mismo tiempo, es también una oportunidad, no sólo para los pensadores/as, sino también para las instituciones y para el propio mercado- para detenerse y pensar, rescatar ideas y personalidades, retomar el pensamiento crítico y el deseo de actuar opacado en tiempos de triunfalismo. No en vano los años setenta, el momento de la última gran transformación del capitalismo, fue también un momento de gran ebullición intelectual y política, en el que el movimiento y el pensamiento feminista alcanzaron niveles de eficacia política, incluso en el contexto español, envuelto entonces en las luchas ciudadanas que se enfrentaban a los últimos coletazos de la dictadura franquista.
