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Controversy over the use of Roman ingots to investigate dark matter and neutrinos

The properties of these lead bricks recovered from ancient shipwrecks are ideal for experiments in particle physics. Scientists from the CDMS dark matter detection project in Minnesota (USA) and from the CUORE neutrino observatory at the Gran Sasso Laboratory in Italy have begun to use them, but archaeologists have raised alarm about the destruction and trading of cultural heritage that lies behind this. The journal ‘Science’ has expressed this dilemma formulated by two Spanish researchers in the United Kingdom.

Buzos junto a un lingote extraído del agua. / Dirección General de Cultura de la Generalitat Valenciana
Polémica sobre el uso de lingotes romanos para investigar materia oscura y neutrinos. Photo: Jose Antonio Moya

Los lingotes de plomo recuperados de antiguos naufragios presentan unas características ideales para los experimentos de física de partículas.

Científicos del detector de materia oscura CDMS en Minnesota (EE UU) y del observatorio de neutrinos CUORE en el Laboratorio Gran Sasso (Italia) los han comenzado a utilizar, pero los arqueólogos advierten sobre la destrucción y el comercio del patrimonio histórico que hay detrás. La revista Science se ha hecho eco de este dilema formulado por dos investigadores españoles.

En la imagen, buzos extrayendo lingotes del pecio Bou Ferrer. Se trata del mayor barco romano en excavación del Mediterráneo, hundido muy cerca del puerto de La Vila Joiosa (Alicante). Una serie de marcas inscritas (IMP. GER. AVG) permiten a los especialistas asegurar que su propietario fue el propio emperador de Roma, probablemente Calígula, Claudio o Nerón.

Dilema sobre el uso en física de lingotes romanos sumergidos. Photo: De Juan-D. G. de Cultura, Generalitat Valenciana

Los lingotes de plomo recuperados de antiguos naufragios presentan unas características ideales para los experimentos de física de partículas. Científicos del detector de materia oscura CDMS en Minnesota (EE UU) y del observatorio de neutrinos CUORE en el Laboratorio Gran Sasso (Italia) los han comenzado a utilizar, pero los arqueólogos advierten sobre la destrucción y el comercio del patrimonio histórico que hay detrás. La revista Science se ha hecho eco de este dilema formulado por dos investigadores españoles.

En la imagen, una submarina durante un sondeo del año 2012 donde se ven alineados algunos lingotes del pecio Bou Ferrer. Se trata del mayor barco romano en excavación del Mediterráneo, hundido muy cerca del puerto de La Vila Joiosa (Alicante). Una serie de marcas inscritas (IMP. GER. AVG) permiten a los especialistas asegurar que su propietario fue el propio emperador de Roma, probablemente Calígula, Claudio o Nerón.

Lingotes de plomo romanos, una tentación para los físicos. Photo: De Juan - D. G. de Cultura de la Generalitat Valenciana

Los lingotes de plomo recuperados de antiguos naufragios presentan unas características ideales para los experimentos de física de partículas. Científicos del detector de materia oscura CDMS en Minnesota (EE UU) y del observatorio de neutrinos CUORE en el Laboratorio Gran Sasso (Italia) los han comenzado a utilizar, pero los arqueólogos advierten sobre la destrucción y el comercio del patrimonio histórico que hay detrás. La revista Science se ha hecho eco de este dilema formulado por dos investigadores españoles.

En la imagen, un lingote del pecio Bou Ferrer. Se trata del mayor barco romano en excavación del Mediterráneo, hundido muy cerca del puerto de La Vila Joiosa (Alicante). Una serie de marcas inscritas (IMP. GER. AVG) permiten a los especialistas asegurar que su propietario fue el propio emperador de Roma, probablemente Calígula, Claudio o Nerón.

Buzos junto a un lingote extraído del agua. / Dirección General de Cultura de la Generalitat Valenciana
Polémica sobre el uso de lingotes romanos para investigar materia oscura y neutrinos. Photo: Jose Antonio Moya

Los lingotes de plomo recuperados de antiguos naufragios presentan unas características ideales para los experimentos de física de partículas.

Científicos del detector de materia oscura CDMS en Minnesota (EE UU) y del observatorio de neutrinos CUORE en el Laboratorio Gran Sasso (Italia) los han comenzado a utilizar, pero los arqueólogos advierten sobre la destrucción y el comercio del patrimonio histórico que hay detrás. La revista Science se ha hecho eco de este dilema formulado por dos investigadores españoles.

En la imagen, buzos extrayendo lingotes del pecio Bou Ferrer. Se trata del mayor barco romano en excavación del Mediterráneo, hundido muy cerca del puerto de La Vila Joiosa (Alicante). Una serie de marcas inscritas (IMP. GER. AVG) permiten a los especialistas asegurar que su propietario fue el propio emperador de Roma, probablemente Calígula, Claudio o Nerón.

Dilema sobre el uso en física de lingotes romanos sumergidos. Photo: De Juan-D. G. de Cultura, Generalitat Valenciana

Los lingotes de plomo recuperados de antiguos naufragios presentan unas características ideales para los experimentos de física de partículas. Científicos del detector de materia oscura CDMS en Minnesota (EE UU) y del observatorio de neutrinos CUORE en el Laboratorio Gran Sasso (Italia) los han comenzado a utilizar, pero los arqueólogos advierten sobre la destrucción y el comercio del patrimonio histórico que hay detrás. La revista Science se ha hecho eco de este dilema formulado por dos investigadores españoles.

En la imagen, una submarina durante un sondeo del año 2012 donde se ven alineados algunos lingotes del pecio Bou Ferrer. Se trata del mayor barco romano en excavación del Mediterráneo, hundido muy cerca del puerto de La Vila Joiosa (Alicante). Una serie de marcas inscritas (IMP. GER. AVG) permiten a los especialistas asegurar que su propietario fue el propio emperador de Roma, probablemente Calígula, Claudio o Nerón.

Lingotes de plomo romanos, una tentación para los físicos. Photo: De Juan - D. G. de Cultura de la Generalitat Valenciana

Los lingotes de plomo recuperados de antiguos naufragios presentan unas características ideales para los experimentos de física de partículas. Científicos del detector de materia oscura CDMS en Minnesota (EE UU) y del observatorio de neutrinos CUORE en el Laboratorio Gran Sasso (Italia) los han comenzado a utilizar, pero los arqueólogos advierten sobre la destrucción y el comercio del patrimonio histórico que hay detrás. La revista Science se ha hecho eco de este dilema formulado por dos investigadores españoles.

En la imagen, un lingote del pecio Bou Ferrer. Se trata del mayor barco romano en excavación del Mediterráneo, hundido muy cerca del puerto de La Vila Joiosa (Alicante). Una serie de marcas inscritas (IMP. GER. AVG) permiten a los especialistas asegurar que su propietario fue el propio emperador de Roma, probablemente Calígula, Claudio o Nerón.

Buzos junto a un lingote extraído del agua. / Dirección General de Cultura de la Generalitat Valenciana
Polémica sobre el uso de lingotes romanos para investigar materia oscura y neutrinos. Photo: Jose Antonio Moya

Los lingotes de plomo recuperados de antiguos naufragios presentan unas características ideales para los experimentos de física de partículas.

Científicos del detector de materia oscura CDMS en Minnesota (EE UU) y del observatorio de neutrinos CUORE en el Laboratorio Gran Sasso (Italia) los han comenzado a utilizar, pero los arqueólogos advierten sobre la destrucción y el comercio del patrimonio histórico que hay detrás. La revista Science se ha hecho eco de este dilema formulado por dos investigadores españoles.

En la imagen, buzos extrayendo lingotes del pecio Bou Ferrer. Se trata del mayor barco romano en excavación del Mediterráneo, hundido muy cerca del puerto de La Vila Joiosa (Alicante). Una serie de marcas inscritas (IMP. GER. AVG) permiten a los especialistas asegurar que su propietario fue el propio emperador de Roma, probablemente Calígula, Claudio o Nerón.

Dilema sobre el uso en física de lingotes romanos sumergidos. Photo: De Juan-D. G. de Cultura, Generalitat Valenciana

Los lingotes de plomo recuperados de antiguos naufragios presentan unas características ideales para los experimentos de física de partículas. Científicos del detector de materia oscura CDMS en Minnesota (EE UU) y del observatorio de neutrinos CUORE en el Laboratorio Gran Sasso (Italia) los han comenzado a utilizar, pero los arqueólogos advierten sobre la destrucción y el comercio del patrimonio histórico que hay detrás. La revista Science se ha hecho eco de este dilema formulado por dos investigadores españoles.

En la imagen, una submarina durante un sondeo del año 2012 donde se ven alineados algunos lingotes del pecio Bou Ferrer. Se trata del mayor barco romano en excavación del Mediterráneo, hundido muy cerca del puerto de La Vila Joiosa (Alicante). Una serie de marcas inscritas (IMP. GER. AVG) permiten a los especialistas asegurar que su propietario fue el propio emperador de Roma, probablemente Calígula, Claudio o Nerón.

Lingotes de plomo romanos, una tentación para los físicos. Photo: De Juan - D. G. de Cultura de la Generalitat Valenciana

Los lingotes de plomo recuperados de antiguos naufragios presentan unas características ideales para los experimentos de física de partículas. Científicos del detector de materia oscura CDMS en Minnesota (EE UU) y del observatorio de neutrinos CUORE en el Laboratorio Gran Sasso (Italia) los han comenzado a utilizar, pero los arqueólogos advierten sobre la destrucción y el comercio del patrimonio histórico que hay detrás. La revista Science se ha hecho eco de este dilema formulado por dos investigadores españoles.

En la imagen, un lingote del pecio Bou Ferrer. Se trata del mayor barco romano en excavación del Mediterráneo, hundido muy cerca del puerto de La Vila Joiosa (Alicante). Una serie de marcas inscritas (IMP. GER. AVG) permiten a los especialistas asegurar que su propietario fue el propio emperador de Roma, probablemente Calígula, Claudio o Nerón.

Two thousand years ago, a Roman vessel with ingots of lead extracted from the Sierra of Cartagena sank across the waters from the coast of Sardinia. Since 2011, more than a hundred of these ingots have been used to build the ‘Cryogenic Underground Observatory for Rare Events’ (CUORE), an advanced detector of neutrinos – almost weightless subatomic particles – at the Gran Sasso National Laboratory in Italy.

In the 18th century, another ship loaded with lead ingots was wrecked on the French coast. A company of treasure hunters retrieved this material and, despite problems with French authorities, managed to sell it to the Cryogenic Dark Matter Search (CDMS) team. This detector located in a mine in Minnesota (USA) looks for signs of the enigmatic dark matter, which is believed to constitute a quarter of the universe.

These two examples have served as reference for the discussion that two researchers have opened between archaeologists, worried by the destruction of underwater cultural heritage, and particle physicists, pleased to have found a unique material for research on neutrinos and dark matter.

As Elena Perez-Alvaro explains to SINC from the University of Birmingham: “Roman lead is essential for conducting these experiments because it offers purity and such low levels of radioactivity – all the more so the longer it has spent underwater – which current methods for producing this metal cannot reach.”

“Lead extracted today is naturally contaminated with the isotope Pb-210, which prevents it from being used as shielding for particle detectors”, adds physicist Fernando González Zalba from the University of Cambridge.

The two researchers have published a study in the journal ‘Rosetta’, also commented upon this month in ‘Science’, which poses a dilemma: Should we sacrifice part of our cultural heritage in order to achieve greater knowledge of the universe and the origin of humankind? Should we yield part of our past to discover more about our future?

“Underwater archaeologists see destruction of heritage as a loss of our past, our history, whilst physicists support basic research to look for answers we do not yet have,” remarks Perez-Alvaro, “although this has led to situations in which, for example, private companies like Odyssey trade lead recovered from sunken ships.” This is the company that had to return the treasure of the frigate Nuestra Señora de las Mercedes to Spain.

Dialogue between underwater archaeologists and particle physicists

The underwater archaeologist and the physicist are encouraging dialogue between both collectives, as well as developing legislation that regulates these kinds of activities, without limiting them exclusively to archaeologists, and including scientists. “Recovery for knowledge in both fields, and not merely for commercial reasons,” the scientists stress.

The jury is still out. In the case of the CUORE detector, for example, in principle the lead from the least well-preserved Roman ingots is used, although their inscriptions are cut and preserved. Some archaeologists also suggests that there are other pieces of valuable metal, such as anchor stocks, rings or tackles for fishing that we should assess whether or not to “sacrifice for science”. The problem is that they are protected by UNESCO’s 2001 Convention on the protection of underwater cultural heritage if they have been under water more than 10 years and the 2003 Convention for safeguarding intangible cultural heritage.

Regarding the habitual use that Romans made of these ingots, Pérez Álvaro points out that there are many theories, “but they were generally used as water-resistant material for pipes, water tanks or roofs, but also in the manufacture of arms and ammunition.”

A special case are the large lead bricks recovered from the largest Roman ship of the excavation of the Mediterranean, the wreck of the Bou Ferrer, which sunk very close to the port of La Vila Joiosa (Alicante). A series of engravings (IMP. GER. AVG) enable specialists to determine that their owner was the Emperor of Rome himself, probably Caligula, Claudius or Nero.

References:

Perez-Alvaro, E. (with González-Zalba, F.) “Experiments on Particle Physics Using Underwater Cultural Heritage: The Dilemma”. Rosetta 13.5: 40-46, 2013. Reference in News de Science 342, 1 November 2013.

Source: SINC
Copyright: Creative Commons

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