Suscríbete al boletín semanal

Recibe cada semana los contenidos más relevantes de la actualidad científica.

Agencia Sinc
Si estás registrado

No podrás conectarte si excedes diez intentos fallidos.

Si todavía no estás registrado

La Agencia SINC ofrece servicios diferentes dependiendo de tu perfil.

Selecciona el tuyo:

Periodistas Instituciones

Una nueva técnica de análisis de imágenes permite determinar la edad y el sexo de un cadáver

Científicos de la Universidad de Granada han desarrollado una técnica que permite determinar la edad y el sexo de un cadáver con una fiabilidad del 95% a partir de un software y un visor. Según los creadores, el sistema es pionero en el mundo y se aleja de las técnicas clásicas de observación macroscópica de las características osteoarticulares, empleadas habitualmente en autopsias.

A la izquierda, un corte horizontal que pasa por la sínfisis del pubis y a la derecha, corte sagital. Imagen: UGR.
Una nueva técnica de análisis de imágenes permite determinar la edad y el sexo de un cadáver . Foto: UGR

Científicos de la Universidad de Granada han desarrollado una técnica que permite determinar la edad y el sexo de un cadáver con una fiabilidad del 95% a partir de un software y un visor. Según los creadores, el sistema es pionero en el mundo y se aleja de las técnicas clásicas de observación macroscópica de las características osteoarticulares, empleadas habitualmente en autopsias.

Un equipo de científicos de la Universidad de Granada ha desarrollado una nueva técnica informática que permite determinar la edad y el sexo de un cadáver con una fiabilidad del 95%.El sistema se basa en un software de descarga gratuita denominado ImageJ y un visor DICOM, también gratuito, denominado K-Pacs.

Los investigadores explican que la nueva técnica "pionera en el mundo" se aleja de las técnicas clásicas de observación macroscópica de las características osteoarticulares que se emplean tradicionalmente al realizar una autopsia, y resulta "mucho más rápido y sencillo".

El autor de este trabajo es Manuel López Alcaraz, investigador del Laboratorio de Antropología Forense de la Universidad de Granada, junto a los profesores Miguel Botella López, Inmaculada Alemán Aguilera y Pedro Manuel Garamendi González.

Para desarrollar su investigación, los científicos analizaron 169 archivos DICOM (Digital Imaging and Communication in Medicine, el estándar reconocido mundialmente para el intercambio de imágenes médicas) procedentes de TAC hospitalarios facilitados por los Servicios de Salud Centrales de Castilla la Mancha (SESCAM), de hombres y mujeres de entre 17 y 90 años.

Análisis de histogramas

En estos estudios se identificaron los cortes sagitales de la superficie articular sinfisaria y del cuerpo del pubis, de manera que de cada estudio se obtuvieron un total de cuatro cortes: dos de cada superficie articular sinfisaria derecha e izquierda y otros dos de cada cuerpo del pubis. Dichos cortes se analizaron mediante técnicas de imagen, extrayendo el histograma de dichas estructuras, utilizando el programa Imagen y utilizando variables estadísticas de los histogramas para ponerlos en relación con la edad y el sexo.

Como explica López Alcaraz, “la edad y el sexo son dos parámetros fundamentales en la antropología forense para identificar un cadáver, y el pubis, una región ósea de reconocido interés al respecto".

En el estudio se ha aprovechado la mayor capacidad que tienen los ordenadores para discriminar entre niveles de grises en un histograma (el ojo humano sólo discrimina 64), poniéndolo en relación con la edad y el sexo.

El investigador destaca que esta técnica podría aplicarse a la virtopsia o autopsia virtual. “En la actualidad, el principal inconveniente de este tipo de autopsia es que, de momento, no puede sustituir al análisis microscópico de los tejidos para conocer las patologías padecidas, si una lesión es vital o postmortal, los días de evolución de una lesión... El presente método, al estar basado en el análisis de imagen, puede intentar aplicarse a la virtopsia para tratar de dar respuesta a muchas más preguntas de las que actualmente puede resolver”, señala.

López Alcaraz destaca que esta investigación supone un paso más en antropología forense. “Hay que intentar aparcar los métodos osteológicos clásicos y abrir camino a las nuevas tecnologías, aprovechando las ventajas que nos brinda la era de la comunicación y la imagen”, destaca el investigador.

Este trabajo, además, ha roto con la tendencia clásica forense de que el pubis resulta de utilidad sólo en el rango de 20 a 40 años, “porque hemos conseguido muy buenos resultados para identificar a personas mayores de 50 años, especialmente en el sexo masculino”, destaca el autor.

Fuente: UGR
Derechos: Creative Commons
Artículos relacionados