Gracias a su biología, estos animales casi no enferman de cáncer, por lo que pueden ser modelos prometedores para observar cómo envejecer de una forma saludable. Un estudio revela que en los pocos casos donde aparecieron tumores nunca se propagaron.
Un nuevo estudio ha registrado con gran precisión los movimientos de koalas salvajes en un paisaje agrícola australiano. Los datos muestran que, aunque los koalas apenas descienden de los árboles, esos breves desplazamientos por el suelo los exponen a peligros mortales como atropellos o ataques de perros.