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Hoy, 4 de febrero, es el Día Mundial del Cáncer. Por ello, la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y las asociaciones de pacientes oncológicos se han reunido esta semana para presentar las últimas cifras del cáncer en España. La incidencia global prevista para la población española en el año 2015 es de 222.069 personas (136.961 varones y 85.108 mujeres).
El cáncer es una de las enfermedades que posee mayor incidencia, prevalencia y mortalidad. Se trata de la segunda causa de muerte en España, la primera en varones. Según los datos elaborados por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), en el año 2015 se diagnosticarán más de 222.000 pacientes con cáncer.
“Los pacientes diagnosticados de cáncer tienen que ser tratados en el marco de un equipo multidisciplinar e integrado, y con un profesional que actúe como referente para el paciente”, reconoce Josep Borràs, coordinador de la Estrategia en Cáncer del Sistema Nacional de Salud (SNS), que propone la atención multidisciplinar como parámetro de calidad y como eje del modelo organizativo de la atención oncológica.
“En los últimos años se ha demostrado que estudios clínicos realizados en España han influido en los tratamientos en cáncer que se realizan no sólo en España, sino en todo el mundo”, afirma Emilio Alba, presidente de la SEOM y jefe de servicio de Oncología Médica del Hospital Clínico Virgen de la Victoria de Málaga.
“Nuestro deber es garantizar la seguridad de los pacientes y los tratamientos más actuales y eficaces, y que los profesionales que tratan el cáncer tengan una formación óptima y puesta al día”, concluye Alba.
El cáncer en España
Uno de cada tres varones y una de cada cuatro mujeres se diagnosticarán de cáncer a lo largo de su vida. Cada año la incidencia del cáncer aumenta en España, pero también disminuye su mortalidad. El envejecimiento de la población y la supervivencia cada vez mayor de los enfermos de cáncer suponen un aumento significativo del número de pacientes que tienen o han tenido cáncer.
Los datos de incidencia anual de cáncer calculada en España para el año 2015 (excluyéndose los casos de cáncer de piel no melanoma), calculados a partir del proyecto GLOBOCAN 2002 de la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC), muestran que en ese año 222.069 personas (136.961 varones y 85.108 mujeres) serán diagnosticadas de la enfermedad, siendo el tipo más frecuente el cáncer colorrectal, por delante del cáncer de pulmón y el cáncer de mama.
La supervivencia del cáncer en España, entendida como la proporción de supervivientes en un tiempo dado tras el diagnóstico, se encuentra pareja a la media europea. En cuanto a la mortalidad, los datos del Centro Nacional de Epidemiología muestran que el cáncer supuso en 2007 la primera causa de muerte en varones y la segunda en mujeres, lo que representó el 26% de las muertes de la población española ese año.
No obstante, los expertos señalan que el riesgo de mortalidad por cáncer ha ido disminuyendo considerablemente desde 1990 hasta 2007. La estimación realizada a partir del cálculo de la prevalencia total del cáncer en EE UU, elaborada por el Instituto Nacional del Cáncer, revela que la prevalencia total de cáncer en España es de más de 1.500.000 personas.
Actualmente existen 110 medicamentos contra el cáncer, de los cuales 20 son fármacos orales. A día de hoy, de los 861 agentes antitumorales que se están desarrollando, tres cuartas partes serán fármacos orales. Se trata de terapias dirigidas contra dianas moleculares que se pueden administrar solas pero que ofrecen una mejor respuesta si se hace en combinación con otros tratamientos, especialmente con quimioterapia.
Las últimas investigaciones españolas en cáncer:
Relación entre suplementos alimenticios y riesgo de cáncer
Atención especializada en función del lugar de residencia
Mutaciones familiares en cáncer de mama y ovario
Investigadores de CNIC han caracterizado los procesos por el que un fármaco común frente a los tumores, las antraciclinas, causa toxicidad cardiaca en un tercio de los pacientes. El estudio muestra además posibles terapias para esta complicación.
En contra de los datos de anteriores estudios, una amplia investigación realizada en hermanos concluye que no hay relación entre la ingesta de este analgésico y antipirético durante la gestación y el riesgo de autismo, TDAH y discapacidad intelectual en los niños.
