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El ministro de Sanidad y Consumo, Bernat Soria, ha presentado hoy los resultados del Barómetro Sanitario 2007, que recoge la opinión de la ciudadanía sobre el Sistema Nacional de Salud (SNS). Las conclusiones muestran la confianza en el funcionamiento de la sanidad pública española, aunque destapan los principales problemas percibidos: las listas de espera y la Ley de Prevención del Tabaquismo.
Según ha explicado en rueda de prensa Bernat Soria, el propósito del Barómetro Sanitario es “conocer las expectativas y la opinión de la ciudadanía como un elemento esencial para establecer las políticas de salud, y avanzar en la cohesión y equidad del sistema, objetivo del Pacto por la Sanidad en el que trabaja el ministerio”.
Los resultados de 2007 muestran que 7 de cada 10 encuestados considera que la sanidad pública funciona “bastante bien” o “bien” con necesidad de algunos cambios. Las mujeres se muestran un poco más críticas: un porcentaje tres puntos mayor de mujeres que de hombres cree que en el sistema sanitario son necesarios cambios fundamentales.
En una escala de puntuación de 1 a 10, el estudio refleja que la satisfacción general con el sistema de salud público se sitúa en 6,3 puntos, por encima de los datos de años anteriores (en 2002, la media fue de 5,9 puntos).
El problema de las listas de espera
Soria ha destacado el cambio de tendencia observado en la preferencia de la ciudadanía por el sistema público sanitario frente al sistema privado. Desde 2003, la inclinación por la opción privada crecía paulatinamente. En esta última edición de la encuesta, sólo se iguala la preferencia de los pacientes por ambos sistemas en la atención especializada.
A pesar de que la mayoría de las valoraciones recogidas muestra una puntuación alta, las personas encuestadas resaltan su opinión negativa sobre los tiempos de espera en los diferentes servicios de asistencia sanitaria, especialmente en la sala de consulta, en la realización de pruebas diagnósticas y en el ingreso no urgente.
Para el 50,4% de la población española la situación de las listas de espera no ha cambiado. El 31,9% cree que las autoridades sanitarias no están tomando iniciativas destinadas a mejorar las listas de espera. Por ello, el ministro ha declarado su propósito de “garantizar tiempos máximos de espera en las patologías que pueden tener secuelas de gravedad o incluso la muerte”.
Confianza en la atención sanitaria
En esta edición, el Barómetro Sanitario ha analizado el grado de confianza en la labor de los profesionales sanitarios y en la valoración de errores relacionados con la asistencia. Así, el 90% de las personas encuestadas afirma que ni ellas ni sus familiares han apreciado ningún tipo de error en la asistencia sanitaria que han recibido, y casi un 85% cree que los médicos y los profesionales de la enfermería realizan adecuadamente su labor. Aunque con pequeñas diferencias, las mujeres manifiestan un menor grado de confianza que los hombres.
Otro de los grandes propósitos del ministerio incluido en el Pacto por la Sanidad es garantizar la cohesión del SNS. En este sentido, los datos del barómetro señalan que la mayoría de las personas considera que el sistema sanitario público es equitativo en el acceso a las prestaciones sanitarias, con independencia del sexo, edad, nivel social y nacionalidad.
Otra asignatura pendiente
Otras cuestiones que registra el Barómetro Sanitario 2007 son los aspectos relativos a la Ley de Prevención del Tabaquismo. En este sentido, Soria ha expresado su descontento con los resultados, ya que sólo un 52,1% de las personas encuestadas cree que, desde la entrada en vigor de la Ley de medidas sanitarias frente al tabaquismo, se fuma menos. “La percepción que tiene la sociedad es que la ley no está dando los resultados deseados”.
El 43,6% cree que las personas no fumadoras sufren más molestias, y el 53,3% cree que la mayoría de los fumadores respetan poco o nada esta ley. En comparación con el año 2006, ha aumentado casi en 8 puntos el porcentaje de personas que están de acuerdo en que habría que endurecer la ley (del 34 al 41,7%).
A este respecto, Soria ha manifestado que hasta que la ley esté más “rodada”, la postura del ministerio será “trabajar para que se cumpla y para que disminuya el tabaquismo”, a partir de campañas de promoción de la salud. El ministro ha apuntado que dentro de la Unión Europea es previsible que aparezcan directivas en este sentido, “un trabajo normativo convergente que puede conseguir disminuir este hábito”.
El Barómetro Sanitario es un estudio anual de ámbito nacional, realizado en colaboración con el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), cuyas conclusiones ayudan a establecer las prioridades de las administraciones sanitarias y a elaborar las políticas de salud correspondientes.
Los resultados del trabajo se pueden consultar en la página web del Ministerio de Sanidad y Consumo (www.msc.es).
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