El abrasador planeta gemelo de la Tierra está seco. Además de las altísimas temperaturas que evaporaron sus recursos hídricos, las simulaciones por ordenador apuntan a otro culpable: el ion HCO+, del que pueden salir disparados hacia el espacio los átomos de hidrogeno, uno de los dos componentes del H2O. Futuras misiones al ‘lucero del alba’ podrían confirmarlo.
En la cima del cerro Chajnantor, a 5640 metros de altitud, el Observatorio Atacama de la Universidad de Tokio (TAO) pretende desvelar los orígenes de planetas, estrellas primordiales y galaxias con nuevos instrumentos infrarrojos.