Desde su origen, nuestro Planeta ha recibido el impacto de rocas y fragmentos de metal que caen del cielo. Se trata de meteoritos, objetos que en la mayoría de los casos proceden de asteroides. Otros, sin embargo, tienen su origen en cometas, en planetas o incluso en nuestra propia Luna. Algunos de estos meteoritos han sido testigos mudos de los casi 4.600 millones de años de historia de nuestro Sistema Solar, permaneciendo prácticamente intactos durante todo ese tiempo y aportándonos una información muy valiosa sobre qué tipo de materiales dieron lugar al Sol y al resto de objetos que orbitan esta estrella. El conferenciante, José María Madiedo Gil, es profesor e investigador de la Universidad de Huelva.