Científicos de la Universidad de Salamanca colaboran con investigadores del Instituto Politécnico de Braganza (noroeste de Portugal), con el objetivo de describir y caracterizar setas con valor gastronómico y plantas silvestres que pueden ser consideradas medicinales y que se ubican en la región de Trás-os-Montes e Alto Douro. Los científicos portugueses quieren conocer las propiedades de estos productos, de gran importancia económica.
La revista Geologica Acta ha publicado un artículo en el que se define El Camp dels Ninots (Caldes de Malavella, Girona) como un Konservat-lagerstätte, nombre alemán que se utiliza para definir un tipo de yacimientos con un estado de preservación excepcional.
Un reciente estudio desarrollado por un grupo de científicos australianos, estadounidenses y europeos, en el que participa la Universidad de Valladolid y el INIA, ha establecido que el llamado reloj biólogico no sólo es privativo de los seres humanos, sino que también lo tienen los ecosistemas. Los resultados de este trabajo han sido recogidos en un artículo publicado en la revista Global Change Biology.
Un equipo de investigación del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA, centro del CSIC) ha determinado el papel de una anexina del parásito Schistosoma bovis. Esta proteína puede explicar en parte la larga supervivencia de este parásito que se hospeda en el torrente sanguíneo de los rumiantes, ya que presenta actividad fibrinolítica y anticoagulante. Este avance supone un paso más para lograr una vacuna contra el gusano.
Investigadores del Centro de Ecología Química Agrícola del Instituto Agroforestal Mediterráneo de la Universidad Politécnica de Valencia, junto con la empresa Ecología y Protección Agrícola (EPA), han desarrollado Scalebur®, un nuevo sistema para luchar contra el piojo rojo de California (Aonidiella aurantii Maskell), una de las principales plagas que ataca a los cítricos.
El proyecto ¿Malas hierbas o diversidad vegetal?, financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad, tiene como objetivo verificar la eficacia de algunas de las medidas destinadas a fomentar la biodiversidad en el valle del Ebro. Tres de ellas cumplen con su objetivo.
El Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA), que pertenece al Departamento de Industria e Innovación del Gobierno de Aragón, ha colaborado con la Asociación Interprofesional para el Desarrollo Agrario (AIDA) para editar el primer atlas para la disección de la canal de los rumiantes.
Investigadores de la Universidad de Valladolid trabajan, desde hace cinco años, en la mejora de la calidad nutricional, funcional y tecnológica de los productos del ganado ovino (leche y lechazos) de raza churra. Según el equipo, el uso de aceites en la alimentación de este ganado durante el inicio de lactación incrementa el contenido de algunos ácidos grasos con efecto beneficioso para la salud humana en la leche y en la carne. El próximo paso será estudiar la adición en la dieta de compuestos procedentes de la industria agroalimentaria con posible efecto antioxidante.