Esta condición provoca que las personas no sientan placer al escuchar música. Un nuevo estudio explora su origen en una desconexión cerebral para entender mejor cómo el cerebro procesa los estímulos positivos.
En los períodos de descanso, muchos se proponen darle un respiro al smartphone y las redes sociales para dedicar su tiempo a otras cosas. Sin embargo, hay quien compara estas intenciones con las dietas détox, que no funcionan.