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El presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Rafael Rodrigo, y el ministro de Educación Superior saudí, Khalid bin Mohammed Al Angari, se han reunido hoy, martes, en el Campus del CSIC en Madrid, para ultimar un acuerdo de colaboración en materia científica y académica. Al acto ha asistido también el consejero y director general de Relaciones Internacionales de Arabia Saudí, Salim Al Malik.
Rodrigo destaca la importancia del acuerdo: “Pretendemos fomentar el intercambio científico, académico, cultural y educativo. El acuerdo que estamos ultimando permitirá mejorar el conocimiento y la experiencia de los investigadores del CSIC y que puedan acceder a las grandes instalaciones científico-técnicas de las universidades saudíes para el avance del conocimiento”.
El acto ha contado también con la presencia de otras autoridades del Consejo: el vicepresidente de Relaciones Internacionales, José Juan Sánchez Serrano, la vicepresidenta de Investigación Científica y Técnica, Carmen Peláez, y el vicepresidente de Organización y Relaciones Institucionales, Francisco Ramón Montero de Espinosa.
La delegación de Arabia Saudí asistente al acto ha estado integrada también por los rectores de las universidades King Saud, King abdulaziz, Hail y Najran, además de directores y altos cargos de otras universidades saudíes.
En la actualidad ambas instituciones están ultimando un acuerdo específico de colaboración para que investigadores de la Universidad King Faisal se formen en diversos centros del CSIC en materia de biología molecular y, en concreto, en investigaciones sobre células madre. Asimismo, otro de los convenios específicos en el que ambas instituciones están trabajando incluirá investigaciones y la colaboración en temas de energías renovables.
El acuerdo marco contemplará, entre otros temas, el intercambio de investigadores, la especialización posdoctoral de jóvenes investigadores y el acceso y uso compartido de grandes instalaciones científicas del CSIC y de las universidades saudíes.
Asimismo, ambas instituciones pretenden promover la colaboración entre sus científicos y grupos de investigación, que podrán realizar proyectos conjuntos e iniciar congresos, redes científicas y seminarios en áreas de interés común.
“Esta reunión sigue la línea del CSIC de apostar por la movilidad y apoyar la internacionalización de su plantilla. Además, el CSIC es el organismo público de investigación español más fuerte en el que se pueden apoyar las empresas y otras instituciones de cualquier país para afrontar la crisis con perspectivas de futuro”, añade Rodrigo.
La nueva institución fomentará y coordinará el uso de la evidencia empírica y el conocimiento científico para mejorar la toma de decisiones y el diseño de políticas públicas, según el jefe del Ejecutivo.
Los finalistas de este año están encabezados por un tipo de medicamentos inyectables prometedores para los problemas de salud asociados a la obesidad. Además, también aparecen en el ranking, el desarrollo de terapias con anticuerpos que pueden ralentizar la neurodegeneración en los enfermos de alzhéimer o el descubrimiento de fuentes naturales de hidrógeno bajo la superficie de la Tierra.
