No solo era cuestión de camuflar a las personas, también era necesario ocultar a los objetos, aunque fuesen tan grandes como un portaaviones.
En de la imagen –el británico HMS Argus, capaz de transportar 18 aviones– aparece pintado en camuflaje dazzle, una técnica pictórica aplicada desde los diseños cubistas –el arte del momento– para romper las líneas de los barcos en el mar. Su inventor fue el oficial Norman Wilkinson. / National World War I Museum