Devastadoras sequías y lluvias torrenciales que generaron enérgicas corrientes de sedimentos son las responsables de que hoy en Somosaguas (Madrid) exista un yacimiento paleontológico. Un equipo internacional de científicos liderado por la Universidad Complutense de Madrid ha averiguado cómo se formó la zona norte del depósito de fósiles, del que los paleontólogos ya han extraído alrededor de 6.600 restos de mamíferos como rinocerontes, caballos o ciervos primitivos.
Bereberes y árabes no son tan diferentes genéticamente como se pensaba, fruto del impacto genético de las migraciones. Sus habitantes tienen marcas en el genoma de los grandes flujos migratorios, según un estudio liderado por el Instituto de Biología Evolutiva de Barcelona.