Investigadores estadounidenses confirman, en un estudio que se publica esta semana en Science, que los efectos reales de las emisiones de CO2 en la atmósfera son diferentes a los que vaticinan el Protocolo de Kyoto y el Panel Intergubernamental Sobre Cambio Climático (IPCC), porque olvidan calcular la interacción de los gases con los aerosoles. El nuevo hallazgo ayudaría a mejorar las estrategias para frenar el calentamiento global.
El Grupo de Ingeniería Ambiental y Bioprocesos de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) lleva diez años trabajando en la aplicación de la metodología de análisis del ciclo de vida en la mejora ambiental de productos y procesos, bajo la supervisión del profesor Gumersindo Feijoo. Entre otras áreas, están especializados en el sector primario, en particular en productos de la acuicultura y de la pesca.
Ayer se hizo público el Inventario de Gases de Efecto Invernadero (GEI) de España con los datos oficiales de las emisiones en 2006. Las cifras reflejan una reducción de un 2,7% respecto al año anterior. Se trata de la primera reducción significativa de las emisiones GEI desde la aprobación del Protocolo de Kioto.