Uno de los grandes retos del Gran Colisionador de Hadrones (LHC) es averiguar por qué las partículas tienen masa. La respuesta propuesta por el Modelo Estándar, teoría que define las interacciones entre partículas fundamentales, es otra partícula: el bosón de Higgs, que aún no ha sido detectada. El físico teórico Guido Altarelli, que en los años 70 contribuyó a la definición del Modelo Estándar y que ha dirigido la división teórica del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN), opina que el LHC puede descubrir una realidad mucho más compleja que la predicha por la teoría.
Localizar los focos y las horas punta de la contaminación de las ciudades ya es posible y sobre todo entendible. Nerea Calvillo (Madrid, 1973), arquitecta y fundadora del proyecto de investigación ‘In the Air’ presentó ayer en Gijón, dentro de la muestra colectiva de la exposición 'Habitar', una herramienta intuitiva que proporciona varias lecturas de la ciudad y sus malos humos. La aplicación podría extrapolarse a otras metrópolis.
El Gran Colisionador de Hadrones (LHC), el mayor acelerador de partículas del mundo situado en Ginebra (Suiza), registró un nuevo récord a principios de mayo al aumentar diez veces su luminosidad instantánea desde su puesta en funcionamiento a 7 teraelectronvoltios (7 TeV) el pasado 30 de marzo. La luminosidad instantánea mide la cantidad de partículas que chocan entre sí en un punto concreto del acelerador, lo que determina el número de colisiones que los científicos pueden analizar. Con este incremento, el acelerador alcanza luminosidades por encima de 1,1 x 1028 protones por segundo y centímetro cuadrado en los cuatro experimentos (ATLAS, CMS, LHCb y ALICE).
La comunidad científica mundial que se dedica al estudio de los componentes fundamentales de la materia está de enhorabuena: el mayor acelerador de partículas del mundo, el Gran Colisionador de Hadrones (LHC) acaba de alcanzar una energía nunca antes registrada en un instrumento similar, con lo que da inicio su programa de investigación. La participación española en este gran experimento se coordina a través del Centro Nacional de Física de Partículas, Astropartículas y Nuclear (CPAN), proyecto Consolider 2010 que reúne a 26 grupos de investigación.
Esta simulación muestra un agujero negro que atrae la materia cercana (en amarillo) y al mismo tiempo proyecta energía hacia el universo en forma de chorro de partículas (azul y rojo), que se mantiene unidas mediantes líneas de campo magnético (verde).
Colisiones de partículas en el detector ATLAS.
Primer haz de iones en su entrada en el punto 2 del LHC, justo antes del detector ALICE.