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Un ensayo clínico compara el Entrenamiento grupal en Habilidades de la TDC (EH-TDC), orientada al aprendizaje de habilidades de autorregulación emocional, con una Terapia grupal Habitual (TH), no centrada en la adquisición de capacidades de autocontrol. Es el primer estudio que evalúa si un entrenamiento intensivo breve y sólo grupal puede resultar efectivo para tratar el llamadoTrastorno límite de la personalidad (TLP).
Un Ensayo Clínico financiado por el FIS y el Centro de Investigación Biomédica en Red en el área de Salud Mental (CIBERSAM) ha evaluado la eficacia terapéutica de una Psicoterapia de Entrenamiento en Habilidades (TEH), orientada al aprendizaje de habilidades de autorregulación emocional, en comparación con una Psicoterapia Habitual (TH), no centrada en la adquisición de capacidades. El estudio ha sido publicado en Behaviour Research and Therapy.
El equipo científico, formado por Joaquim Soler, Juan Carlos Pascual, Thaïs Tiana, Anabel Cebriá, Judith Barrachina, M. Josefa Campins, Ignasi Gich, Enrique Alvarez y Víctor Pérez, de los departamentos de Psiquiatría y Epidemiología del hospital Santa Creu i Sant Pau, la Universitat Autónoma de Barcelona y el CIBER de Salud Mental, analizó a 60 pacientes, diagnosticados de Trastorno Límite de la Personalidad (TLP), que fueron asignados aleatoriamente y tratados con TEH o TH.
Durante el periodo de tratamiento fueron evaluados quincenalmente mediante escalas y cuestionarios por un psiquiatra, ajeno al grupo de tratamiento de cada paciente. Las dos intervenciones se realizaron en grupos de 8 a 10 pacientes TLP y durante un periodo de 3 meses de tratamiento. En total, 14 sesiones semanales de terapia grupal de 2 horas de duración por sesión, que incluían aproximadamente a 10 pacientes por grupo.
Al final del estudio, la intervención de TEH se asoció a una mejor retención de los pacientes a terapia, con sólo un 34.5% de abandonos del grupo en comparación con un 63.4% en el grupo de TH. Además, los pacientes tratados con TEH mejoraron estadísticamente más que los que recibieron TH en áreas mayoritariamente relacionadas con estado anímico y emoción como son depresión, ansiedad, irritabilidad e inestabilidad afectiva y disminuyeron de forma global la sintomatología psiquiátrica previa.
En resumen, el entrenamiento semanal en habilidades de autorregulación emocional resulta efectivo en la mejoría sintomatología de los pacientes diagnosticados de TLP y permite una aplicación únicamente grupal. Los entrenamientos en habilidades son fácilmente adaptables a distintos recursos dentro del ámbito de la salud mental y su brevedad y aplicabilidad en formato grupal le proporcionan una buena relación coste-beneficio.
El trastorno límite de la personalidad (TLP)
El TLP es uno de los retos más difíciles a los que se enfrenta el psiquiatra en la práctica clínica diaria. Es un trastorno psiquiátrico frecuente y grave que afecta a un 2% de la población y se calcula que entre el 8 y el 10% fallece por suicidio consumado. Los pacientes TLP necesitarán prolongadas terapias individuales y requieren con mucha frecuencia tratamiento farmacológico, más que los pacientes que sufren de una depresión.
Existen pocas terapias que se haya demostrado efectivas para el TLP. De entre ellas, la Terapia Dialéctica Conductual (TDC) se ha convertido en el tratamiento de elección al estar avalada por múltiples estudios controlados. Pero resulta larga, compleja y, por consiguiente, excesivamente costosa. Éste es el primer estudio que evalúa si un entrenamiento intensivo breve y únicamente grupal de la TDC puede resultar efectivo para el tratamiento del TLP.
Un equipo de la Universidad Rey Juan Carlos está abordando el reto de definir y diseñar cómo se visualizará este gemelo virtual para simular distintos cambios de medicación y de tratamientos en esquizofrenia, ictus y epilepsia.
Las personas con una mayor predisposición genética a dormir poco tienen más probabilidades de desarrollar futuros síntomas depresivos. Sin embargo, en las que presentan más predisposición a la depresión no se detecta una mayor probabilidad de dormir poco, según un estudio con más de 7.000 personas en Reino Unido.
