Un pueblo de Salamanca alberga uno de los museos científicos más singulares que podamos encontrar: el único dedicado a una falla, en concreto, la fractura del terreno que va desde esta localidad, Juzbado, hasta Penalva do Castelo, en Portugal. Una investigación internacional, liderada por la Universidad de Salamanca, ha datado las rocas que se encuentran justo a su entrada: son granitos de entre 320 y 340 millones de años.
Investigadores de la Universidad de Granada han demostrado que las crecientes entradas en la península ibérica de polvo sahariano rico en nutrientes minerales, unidas al incremento de la temperatura media de las lagunas de Sierra Nevada en la útima década, ha llevado al declive de algas mixotróficas, que son claves en la red trófica de ecosistemas acuáticos.
Un año más Madrid incumple los valores límite legales de contaminación por dióxido de nitrógeno, así como valores recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), para diversos contaminantes. Sin embargo, en el último año se ha producido un notable descenso de la polución en la capital respecto a años anteriores para algunos contaminantes.
El rastro de los Reyes Magos se pierde antes de llegar al más remoto de los continentes, la Antártida. En este vasto desierto helado, con temperaturas que llegan a alcanzar los 90 grados bajo cero, solo unos pocos científicos pasan la Navidad trabajando. Tres de ellos nos cuentan cómo celebrarán estas fechas en medio de la nada.
La mayoría de las infraestructuras árticas, incluidas las industriales y de transporte, estarán en riesgo a mediados de siglo debido al deshielo. Esto ocurrirá aun si se cumplen los objetivos del Acuerdo de París.
El hielo de Groenlandia es más sensible al cambio climático de lo que se pensaba. Esta es la conclusión de un nuevo estudio cuyos datos revelan un incremento del 30% en la desaparición de la capa superficial desde comienzos del siglo XX, con consecuencias directas sobre el aumento del nivel del mar.
Un gigantesco cráter de 31 km de diámetro, tan grande como el área metropolitana de Madrid, se oculta bajo un glaciar de Groenlandia. Los científicos que lo han descubierto estiman que el meteorito que lo produjo pudo impactar hace entre tres millones de años y tan solo 12.000 años. Quizá nuestros antepasados no vieron la colisión, pero pudieron sentir sus consecuencias climáticas.
Hacía más de cinco siglos que no llovía en el corazón hiperárido del desierto de Atacama (Chile) pero lo ha hecho en los últimos tres años, probablemente por los efectos del cambio climático. Como consecuencia se ha producido la devastación de su comunidad bacteriana adaptada a la sequía, un suceso que científicos españoles han analizado para estudiar si algo parecido pudo ocurrir en Marte.
Respirar aire contaminado desencadena de 9 a 33 millones de visitas anuales a las salas de emergencias en hospitales de todo el mundo. Esta es la conclusión del primer estudio global de asma relacionado con la polución.