La Agencia Espacial Europea comparte las primeras imágenes del satélite Sentinel 1-D donde expone desde la ciudad de Bremen a zonas vulnerables al cambio climático como el hielo de la Antártida, la península de Tierra de Fuego y los glaciares Thwaites y Pine.
El martes 4 de noviembre, la Agencia Espacial Europea lanzó desde la Guayana Francesa el último de los satélites de la misión Sentinel-1, que tiene como objetivo proporcionar imágenes de alta calidad de la Tierra. El servicio se usará para la respuesta ante catástrofes, observación del clima y el seguimiento de los buques en las zonas marítimas.
El satélite Sentinel-2C del programa Copernicus de la Unión Europea ha despegado esta semana a bordo del último lanzador Vega desde la Guayana Francesa. La nave proporcionará, junto a otra de su serie, imágenes de alta resolución para la vigilancia terrestre, acuática y atmosférica de nuestro planeta.
Sentinel-3 detecta el calor extremo en España y Francia. / UE-Copernicus Sentinel-3 imagery
El satélite Sentinel-2 capta el río de lava desde el espacio.
El seguimiento de los seísmos que precedieron a la erupción en La Palma, la deformación del terreno, el avance de la lava, las casas destruidas y las emisiones no sería posible sin los satélites que están ayudando durante esta emergencia, especialmente los centinelas del programa europeo Copernicus.
Imagen por satélite del despertar del volcán en La Palma
Un gigantesco bloque de hielo con una superficie de 4.320 km2 se ha separado de la plataforma antártica de Ronne, en el mar de Weddell. El colosal iceberg, bautizado como A-76, ha sido detectado por satélites de la Agencia Espacial Europea.
Este sábado se ha puesto en órbita el satélite Sentinel-6A Michael Freilich tras despegar desde EE UU a bordo de un cohete de SpaceX. Su potente altímetro radar ofrecerá mediciones sobre el ascenso de los océanos, un problema global que amenaza el modo de vida de los millones de personas que viven en las costas.