emoción

Los desechos corporales se asocian a las reacciones de asco de forma elevada / Criterion.
Heces, vómitos, mocos y sangre, lo que más asco provoca en los españoles
11 junio 2013 9:49
divulgaUNED

Hasta ahora no existía ningún estudio que midiera lo que despierta repugnancia en la población española. Investigadores de la UNED lo han estudiado y han descubierto que lo que más perturba son los desechos corporales, por encima de animales desagradables, alimentos descompuestos o basuras. Además, en otra investigación han demostrado que el asco predice síntomas fóbicos, como por ejemplo, la aversión a las inyecciones.

El 90% asocian el rojo con un calor cálido, pero el porcentaje se reduce al 60% cuando se observa el amarillo. ¿Y cual es la sensación si se combinan los dos?. En la fotografía un grupo de personas miran un cuadro de Mondrian. Imagen: FlickrDelusions
Un curioso test a escala global
Emociones de colores
29 febrero 2012 12:00
Enrique Sacristán

¿Un diseñador aprecia los colores igual que cualquier otro profesional? ¿Y un joven respecto a una persona mayor? No, según un experimento desarrollado en ocho países. Los resultados muestran que la nacionalidad, el sexo, la edad y la formación del observador influyen a la hora de combinar colores, una información de interés para las campañas de marketing.

La carga mental y emociones como el enfado o la tristeza influyen en la conducción de motos
Las emociones pueden suponer un riesgo en la conducción de motos
23 diciembre 2011 8:56
Fundación Descubre/ SINC

Investigadores de la Universidad de Granada determinan los factores que intervienen en la toma de decisiones ante situaciones de riesgo de personas que conducen ciclomotores y motocicletas. Entre ellos destacan la carga mental y emociones como el enfado o la tristeza.



La incidencia de esquizofrenia es dos veces superior en las personas que viven en la ciudad
Los urbanitas son más sensibles al estrés
22 junio 2011 19:00
SINC

Un estudio internacional, publicado hoy en la revista Nature, revela que las personas que han nacido y viven en áreas urbanas tienen un mayor riesgo de sufrir desórdenes de ansiedad y estrés. La investigación señala que la vida en la ciudad afecta a dos regiones cerebrales reguladoras de las emociones.