El SARS-CoV-2 no ha sido fruto de una manipulación contra las grandes economías gestada en un laboratorio. Los científicos ya han comprobado que se originó por procesos naturales y probablemente se transmitió a las personas desde los murciélagos pasando por diferentes especies. Aún no saben si se convirtió en patógeno para los humanos después de habernos contagiado. Si ese paso sucedió antes, en un animal, la posibilidad de que se produzcan más brotes en el futuro aumentaría.
La descendencia de los machos que tienen muchos competidores para aparearse y convertirse en padres presenta más mutaciones dañinas en su ADN que las crías de machos sin rivales. Sin embargo, el efecto de este fenómeno a largo plazo podría ser la clave de la variabilidad genómica.
Un equipo internacional con participación de la Universidad de Granada ha secuenciado por primera vez en el pinzón cebra un cromosoma que solamente se encuentra en las células germinales. El estudio demuestra que se originó hace decenas de millones de años y estaría presente en todas las especies de estas aves.
El poblamiento de las Baleares pudo deberse a la llegada de pueblos esteparios a la península ibérica hace 4.000 años, según un nuevo estudio, con participación española. El análisis de 61 nuevos genomas de poblaciones que habitaron varias islas del Mediterráneo occidental apunta a que hubo contactos entre estas y pobladores de la costa de África del Norte y el continente europeo.
La revista Nature publica hoy 23 estudios sobre el genoma del cáncer. Entre los resultados se describe el catálogo de 38 tipos de tumor y la identificación de mutaciones años antes de que se produzca la enfermedad, lo que apunta hacia mejores diagnósticos y tratamientos. España ha formado parte de este proyecto.
Investigadores del Centro de Regulación Genómica de Barcelona han desarrollado un algoritmo capaz de comparar 1,4 millones de secuencias genéticas a la vez. Esto permite clasificar y analizar las relaciones evolutivas entre las distintas especies a escalas mucho mayores que hasta ahora.
Un equipo internacional, con participación española, ha secuenciado el genoma de una muestra de trigo egipcio de 3.000 años de antigüedad. El análisis de ADN de este cereal antiguo demuestra que los humanos ya lo habían sometido a un proceso de domesticación en el año 1.000 a.C. Según los científicos, el trabajo sirve para encontrar variantes genéticas que puedan adaptarse mejor al cambio climático.
Investigadores del Centro de Regulación Genómica, en Barcelona, arrojan luz sobre cómo el genoma organiza los grupos de genes implicados en procesos concretos, como la secreción de toxinas. Han realizado un estudio con hongos y han identificado más de 11.000 familias de genes agrupados o próximos en el genoma.
Investigadores españoles han liderado un trabajo que describe las bases moleculares de la predisposición genética a la leucemia. Una de cada 2.000 personas de países occidentales tiene en la actualidad leucemia linfática crónica, el tipo más frecuente en adultos.
Un equipo de científicos ha secuenciado el genoma de la araña Dysdera silvatica, una especie endémica que habita en los bosques de laurisilva de las islas de La Gomera, La Palma y El Hierro. El nuevo trabajo revela la primera secuenciación del genoma de un artrópodo propio de las islas Canarias, un archipiélago con una rica biodiversidad en especies endémicas que se distribuyen por todo el territorio insular.