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Un grupo de investigadores ha desarrollado un nuevo sistema de marcaje que se centra en el monitoreo acústico de la alondra de Dupont, a partir de la capacidad de estas aves para reconocer a los individuos de su especie a través de los sonidos que emiten.
Las técnicas de marcaje de las aves como el anillamiento han sido esenciales desde que se empezaron a promover en España en 1930 para establecer y examinar las propiedades demográficas de las especies. Sin embargo, muchos de estos métodos obligan a capturar, manipular y marcar a los animales de forma que sus movimientos no se vean influidos por la intervención humana.
Para complementar esta técnica habitual de marcaje físico con una anilla de color a las aves, un equipo de científicos de la Estación Biológica de Doñana, perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas, ha demostrado que la alondra de Dupont (Chersophilus duponti) tiene vocalizaciones específicas que permiten a los científicos utilizar el sonido para el reconocimiento individual. La investigación se publicó el pasado noviembre en la revista Journal Avian Biology.
Según Paola Laiolo, una de las autoras del estudio, “el análisis bioacústico (frecuencia, duración, número de notas, etc.) permite identificar la voz característica de cada miembro de una población y analizar el sonido con un software específico”, dado el carácter elusivo de esta ave.
El marcaje acústico permite hacer análisis demográficos, observar a los individuos y estudiar los años que éstos sobreviven. Se trata de un seguimiento a largo plazo de cada una de sus “firmas acústicas”. “A diferencia de las técnicas tradicionales, el marcaje acústico es poco invasivo, pues no es necesario capturar al animal ni ponerle una anilla que genera estrés. Así, no se le toca nunca”, precisó a SINC la científica.
Según la investigación, la naturaleza compleja de las llamadas de las aves -que incluye hasta cinco notas- proporciona amplias combinaciones individuales que los científicos han medido para determinar las variaciones y características espectro-temporales. La alondra de Dupont es conocida por su repertorio versátil, diverso y complejo. Sonidos que han permitido a los científicos reconocer a los individuos.
Los resultados han demostrado que las técnicas bioacústicas aportan información fidedigna en un plazo de tiempo menor en el estudio de campo que otros métodos. “No obstante, aunque tanto el marcaje acústico como el de anillas produzcan resultados similares en términos de fidelidad territorial y de dispersión de movimientos de las aves, difieren en los índices de relocalización, debido a las diferencias de estatus territorial entre los machos seleccionados”, especifica Laiolo.
Los científicos concluyen que el monitoreo acústico debería utilizarse más como complemento del marcaje físico que como alternativa, ya que las dos fuentes pueden combinarse para corregir ciertos factores y mejorar el conocimiento sobre la avifauna española.
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P. Laiolo, M. Vogeli, D. Serrano, J.L. Tella. “Testing acoustic versus physical marking: two complementary methods for individual-based monitoring of elusive species”, Journal of Avian Biology 38 (6): 672-681, Nov. 2007.
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