Un estudio reciente revela que estos diminutos habitantes de Fiyi enfrentan una caída dramática que refleja una crisis más amplia dentro del mundo de los insectos. Los expertos destacan que estas pérdidas coinciden con la colonización del archipiélago, poniendo en riesgo procesos ecológicos esenciales como la polinización y la fertilidad del suelo.
Especies de tiburón como el peregrino y la mielga sufren una reducción progresiva en el litoral de la Costa Brava, según alerta un grupo de expertos españoles. El trabajo apunta, además, a la posible desaparición de los tiburones musolas en esta región marina de las costas de Cataluña.
El año pasado se alertó de una catastrófica disminución de insectos debido a la pérdida de hábitat, el cambio climático y la contaminación. Ahora, un nuevo estudio suaviza los términos y apunta que, aunque la población de las especies terrestres está mermando, la de las acuáticas parece estar incrementando.
El lince boreal cuenta con una población relativamente grande y muy distribuida en diferentes regiones geográficas del planeta. Sin embargo, la especie presenta una variabilidad genética muy baja, comparable con especies en peligro. Esta paradoja se explica por el descenso poblacional continuado desde hace miles de años provocado por la expansión humana.
Un nuevo modelo ha logrado predecir el riesgo de extinción de estos insectos por el cambio climático y revela que en muchas zonas, como la península ibérica, ya han sobrepasado el umbral de tolerancia al aumento de temperaturas.
En las últimas cinco décadas, EE UU y Canadá han experimentado un declive masivo de poblaciones de cientos de especies de aves. Gracias a los datos recopilados a largo plazo en programas de monitorización, un equipo de científicos ha determinado que estas se han reducido en un 29 %, lo que corresponde a 2.900 millones de aves desde 1970, sobre todo por los impactos antropogénicos.
Allí donde la deforestación aún no ha hecho mella, la caza merma las especies de mamíferos de las selvas tropicales. Un equipo de científicos ha estimado por primera vez el impacto de la caza y muestra que esta actividad reduce en un 40% las poblaciones de grandes mamíferos en los trópicos.
El reno es uno de los símbolos de la Navidad, pero está en horas bajas. A pesar de contar con más disponibilidad de alimento por el deshielo, los parásitos, la caza, la depredación, y el cambio climático están diezmando las poblaciones de estos mamíferos, protagonistas de #Cienciaalobestia. Algunas poblaciones de la tundra ártica han disminuido más de un 50% en las últimas dos décadas.
Ampliamente distribuida por Eurasia y Norteamérica, la comadreja –la especie más pequeña entre los mustélidos– no muestra problemas aparentes. Pero un estudio realizado en las últimas dos décadas revela que este pequeño carnívoro es cada vez menos frecuente al noreste de nuestro país debido al cambio en el uso del suelo y al cambio climático.