El meteoro que se avistó el pasado 31 de julio desde el centro de la península ibérica es un fragmento procedente del cometa 169P/NEAT, responsable de la lluvia anual de las Alfa Capricórnidas. Así lo confirman cámaras de la Agencia Espacial Europea y otras instituciones europeas.
Llega el espectáculo astronómico de mediados de agosto: la lluvia de las perseidas o ‘lágrimas de San Lorenzo’, este año un poco deslucidas por el brillo de la luna. Aunque se llamen ‘estrellas fugaces’, en realidad son partículas que deja atrás el cometa 109P/Swift-Tuttle y se ‘encienden’ al entrar en nuestra atmósfera. Se podrán observar hasta 50 en una hora en lugares sin contaminación lumínica.
A pesar de los evidentes signos de desgaste tras 10 años de periplo por el planeta rojo, el vehículo de la NASA está a punto de comenzar un nuevo y emocionante capítulo de su misión mientras escala una montaña marciana.
Gracias a la radiación del universo primigenio, científicos de Japón y EE UU han logrado investigar la materia oscura más atrás en el tiempo como nunca antes, tan solo 1.700 millones años después del Big Bang. Algunos resultados del estudio no se ajustan a los modelos cosmológicos.
El ‘gran paso’ de la humanidad hace 50 años. / Wearbeard
Muchas de las propiedades del largo camino que va desde la química interestelar a la prebiótica y, finalmente, a la vida, podrían mostrar patrones simples y universales. Así lo sugiere NetWorld, un modelo computacional basado en redes complejas desarrollado en el Centro de Astrobiología.
Los sistemas binarios donde un agujero negro ‘devora’ a una estrella compañera son bien conocidos en astronomía, pero en la vecina galaxia de la Gran Nube de Magallanes se ha encontrado uno donde el agujero negro no está activo, no emite potentes niveles de rayos X, mientras danza junto a una estrella azul.
El análisis con algoritmos de aprendizaje automático de 90 millones de imágenes de cráteres de impacto en la superficie del planeta rojo, ha permitido localizar la zona de la que salió Black Beauty. Esta roca de 320 gramos contiene material ígneo marciano de hace 4.500 millones de años y podría dar nuevas pistas geológicas sobre la formación de los planetas del sistema solar.
Paisajes de nacimiento estelar, tórridas atmósferas exoplanetarias, una estrella agonizante, interacciones galácticas y la mejor vista infrarroja del universo lejano protagonizan la primera serie de imágenes del mayor telescopio espacial de la historia.