Un equipo científico ha desarrollado materiales artificiales capaces de modificar su forma y comportamiento mediante campos magnéticos, sin alterar su composición. El avance abre nuevas posibilidades en robótica blanda, biomedicina y protección frente a impactos.
La nueva herramienta consigue predecir cuándo y por qué tiene lugar la agregación de proteínas, un mecanismo vinculado al alzhéimer y otras 50 enfermedades que afectan a 500 millones de personas. Los resultados muestran un gran potencial para la investigación en enfermedades neurodegenerativas y la mejora de la producción de fármacos.