Un informe presentado hoy por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura expone la evaluación global más detallada hasta la fecha sobre las poblaciones de peces marinos. El 64,5 % de las evaluadas se explotaron dentro de niveles sostenibles, mientras que el 35,5 % fueron clasificadas como sobreexplotadas.
En el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos 2025, que se celebra estos días en Niza (Francia), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha lanzado una actualización de su informe sobre el estado de los recursos pesqueros marinos mundiales, basado en los datos de captura más recientes.
El informe revela tanto los avances logrados en zonas con gestión pesquera efectiva como los persistentes desafíos globales en sostenibilidad. “El conocimiento ayuda a mejorar el estado de las pesquerías. Una mejor gobernanza y una gestión adecuada garantizan que las poblaciones se recuperen a tiempo, como ha ocurrido en algunas partes del mundo”, dice a SINC Rishi Sharma, oficial superior de pesca en la oficina regional de la FAO para Asia y el Pacífico.
Esta evaluación integral, que ha contado con la participación de más de 650 expertos de 92 países, representa el análisis más detallado y transparente realizado hasta la fecha, al examinar 2.570 poblaciones individuales de peces, lo que supone un aumento significativo respecto a las ediciones anteriores del informe.
El estudio confirma que el 64,5 % de las poblaciones pesqueras se explotan dentro de niveles biológicamente sostenibles, mientras que el 35,5 % están sobreexplotadas. “Esto parece contradictorio, pero no lo es, la sobrepesca ha pasado del 27 % en 2011 al 35 % en 2021 (lo que implica un cambio de aproximadamente el 0,8 % anual, redondeado al 1% anual)”, apunta la oficial superior de pesca de la FAO.
El conocimiento ayuda a mejorar el estado de las pesquerías. Una mejor gobernanza y una gestión adecuada garantizan que las poblaciones se recuperen a tiempo, como ha ocurrido en algunas partes del mundo
Al ponderar los datos por volumen de producción, el 77,2 % de los desembarques globales provinieron de fuentes sostenibles a escala mundial en 2021, lo que indica que las pesquerías de mayor rendimiento están, en promedio, mejor gestionadas.
Respecto a la sobrepesca, esta continúa aumentando, con un crecimiento de aproximadamente un 1 % anual, en promedio. “La mejora de los datos en lugares con buena gestión informa a los gobiernos sobre la necesidad de tomar medidas basadas en la evidencia. En las zonas en las que la sostenibilidad es baja, estos enfoques ayudarán también a mejorar la comprensión de la pesca, lo que a su vez permitirá a los responsables políticos tomar medidas”, asegura la experta.
La gestión efectiva sigue siendo la herramienta más poderosa para conservar los recursos pesqueros
"La gestión efectiva sigue siendo la herramienta más poderosa para conservar los recursos pesqueros. Esta revisión ofrece una comprensión sin precedentes que permite tomar decisiones mejor fundamentadas en datos", afirma QU Dongyu, director general de la FAO. “Este informe proporciona a los gobiernos las pruebas necesarias para formular políticas y coordinarse de manera coherente”, añade.
El estudio confirma que el 64,5 % de las poblaciones pesqueras se explotan dentro de niveles biológicamente sostenibles, mientras que el 35,5 % están sobreexplotadas. / Pixabay
Este nuevo trabajo introduce una nueva metodología escalonada para la evaluación de poblaciones y proporciona análisis específicos por región y tendencias según la especie.
En el Pacífico Noreste, por ejemplo, el 92,7 % de las poblaciones se pescan de forma sostenible gracias a una gestión sólida, basada en la ciencia y con cumplimiento efectivo. La región de la Antártida, evaluada por primera vez, reporta una sostenibilidad del 100 % en sus poblaciones analizadas, lo que demuestra el potencial de la cooperación internacional y el enfoque ecosistémico.
En contraste, otras regiones siguen bajo presión. El Pacífico Sudeste y el Atlántico Centro-Oriental reportan niveles de sostenibilidad del 46 % y 47,4 %, respectivamente. En estas zonas, factores como la limitada capacidad institucional, la gobernanza fragmentada y la falta de datos dificultan la gestión eficaz, a pesar de la alta dependencia de la pesca para la seguridad alimentaria y el empleo local.
El informe destaca mejoras en la sostenibilidad de las poblaciones de atunes (el 87 % de las evaluadas se consideran sostenibles, con el 99 % de los desembarques de atún provenientes de fuentes sostenibles), así como preocupaciones persistentes en torno a las especies de aguas profundas y los tiburones migratorios, que siguen bajo presión debido a la falta de datos y a la complejidad de su gestión.
“Una mayor cooperación entre las OROP y las OROP de túnidos garantizará la recuperación de las poblaciones en peligro. Las MMC dirigidas a estas especies sobreexplotadas y una aplicación y cumplimiento adecuados garantizarán que esto funcione bien”, explica Sharma.
Una mayor cooperación entre las OROP y las OROP de túnidos garantizará la recuperación de las poblaciones en peligro
Entre las 10 especies marinas más capturadas, como la anchoveta, el abadejo de Alaska, el atún listado y el arenque atlántico, el 60 % de las poblaciones evaluadas son sostenibles. Al ponderar por volumen de producción, se estima que el 85,8 % de los desembarques provienen de poblaciones biológicamente sostenibles.
FAO
La FAO insta a los países a invertir en recolección de datos y sistemas de gestión, enfoques basados en la ciencia, y a cerrar brechas de capacidad y alinear metas de sostenibilidad para mantener a la pesca en buen camino.
Por ello, hace un llamamiento a una Transformación Azul. “Esta iniciativa implica que el 100 % de nuestras pesquerías estén bajo algún tipo de gestión. Aquellas gestionadas implican implícitamente que cumplirán algunos objetivos de sostenibilidad, y como se demuestra en el informe, sus niveles de sostenibilidad son superiores a los de las no gestionadas. Por lo tanto, esta transformación contribuirá a alcanzar estos objetivos”, asegura Sharma.
Esta iniciativa implica que el 100 % de nuestras pesquerías estén bajo algún tipo de gestión
“El próximo paso es claro: los gobiernos deben ampliar lo que funciona y actuar con urgencia para asegurar que las pesquerías marinas beneficien tanto a las personas como al planeta”, recalca Qu.
El desarrollo de planes de gestión pesquera a escala nacional con metas y objetivos establecidos, y la existencia de programas de seguimiento y evaluación que garanticen su cumplimiento, contribuirán a garantizar que se alcancen estos objetivos, según los autores del informe.