Un estudio español establece cinco patrones atmosféricos que favorecen la aparición de un incendio provocado por rayos en el noroeste de la Península Ibérica. El objetivo es crear nuevos métodos para predecir tormentas, donde se acumula la carga eléctrica que desencadenará el rayo.
Las matemáticas pueden a ayudar a predecir y a comprender mejor el comportamiento del fuego. Determinar cuál puede ser la difusión de las llamas de un fuego, la trayectoria del humo o señalar los mecanismos para reducir su impacto en personas son cuestiones que se pueden obtener gracias a la aplicación de técnicas de análisis numéricos, ecuaciones y estadística, entre otras. Profundizar en estos procedimientos y además ponerlos al servicio de los técnicos en gestión ambiental o a los profesionales que trabajan en la extinción de incendios naturales o urbanos es uno de los objetivos del congreso “Matemáticas y fuego”, que se celebra a lo largo de esta semana en la Universidad de Zaragoza.