En el Simposio Internacional sobre Programación de la Nutrición Temprana, que se celebra en Granada el 23 de abril se presentarán pruebas de que los cambios en la dieta temprana pueden implicar efectos a largo plazo en la estructura del cerebro.
Una tesis defendida por la profesora Amaia Irazusta Astiazaran en la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) analiza los hábitos de alimentación del alumnado universitario y su efecto en la salud de estos jóvenes.