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Encontrado un pequeño esqueleto sin identificar asociado a huevos de dinosaurio en Coll de Nargó

Esta semana ha comenzado la nueva campaña de excavaciones paleontológicas en Coll de Nargó (Cataluña). Las primeras tareas van encaminadas a extraer un pequeño esqueleto que se ha encontrado hace unas semanas junto a un conjunto de huevos de dinoasuarios que podría pertenecer a una cría de dinosaurio o a un depredador. El hallazgo es excepcional ya que en esta zona se habían encontrado muchos nidos de huevos de dinosaurio, pero nunca un esqueleto tan completo como este.

Restos en la roca de los fósiles encontrados
Restos fósiles del pequeño esqueleto encontrado en Coll de Nargó de hace más 65 millones de años y de identidad aún desconocida. / ICP.

Ayer comenzaron las excavaciones para extraer un pequeño esqueleto de hace más 65 millones de años y de identidad aún desconocida en Coll de Nargó, en el Alt Urgell (Cataluña).

La campaña de excavaciones paleontológicas en este yacimiento están dirigidas por el Grupo de Investigación del Mesozoico del Instituto Catalán de Paleontología Miquel Crusafont (ICP) con la colaboración del Área de Estratigrafía de la Universidad Autónoma de Barcelona, el Museo de la Conca Dellà, grupos de aficionados vinculados al Institut de Estudis Ilerdencs y el colectivo ADAU (Amics dels Dinosaures de l’Alt Urgell).

La proximidad de numerosas puestas de dinosaurios y la presencia de cáscaras cercanas al fósil hace pensar a los investigadores que podría tratarse de una cría de dinosaurio o de algún depredador que se alimentaba de estas. Los resultados de la investigación no se conocerán hasta después del verano, pero aportarán nueva información sobre el comportamiento reproductor de estos animales.

La parte visible del esqueleto está formada por cinco o seis vértebras y huesos que podrían pertenecer al brazo del animal

La parte visible del esqueleto está formada por cinco o seis vértebras y huesos que podrían pertenecer al brazo del animal. Se trata de un esqueleto articulado, es decir, los restos se encuentran en posición anatómica lo que lo hace muy interesante para los paleontólogos. Los investigadores barajan dos hipótesis: que se trate de una cría de un dinosaurio o de un depredador.

Nuevos datos sobre la reproducción de los últimos dinosaurios

En los próximos días se perforará alrededor del fósil y se inyectará cemento expansivo para extraer un bloque de roca que contenga el esqueleto. Este bloque será trasladado al laboratorio de preparación del ICP donde será restaurado para que pueda ser estudiado por los investigadores. No será hasta entonces que se podrá conocer más detalles sobre la especie a la que pertenece este fósil.

Si se trata de un dinosaurio, su análisis podría permitir conocer qué especie es la responsable de las numerosas puestas de la zona. La alternativa que barajan los científicos es que se trate de los restos de un depredador carnívoro que se alimentase de dinosaurios, lo que apoyaría la hipótesis de que los dinosaurios ponían los huevos y los abandonaban. Este hecho permitía que apareciesen depredadores que atacasen las crías.

El hallazgo de los restos fue realizada Francesc Pérez Peralba, miembro de los Amigos de los Dinosaurios del Alt Urgell (ADAU) que dio aviso a paleontólogos del ICP. Para garantizar la preservación de un fósil tan frágil, y se ha realizado un molde de precisión con silicona.

Fuente: Instituto Catalán de Paleontología Miquel Crusafont
Derechos: Creative Commons
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