Tras recoger varios ratones morunos en el Parque Nacional de Doñana y su entorno, investigadores de la Universidad de Córdoba han podido desarrollar una metodología innovadora para conocer las alteraciones que produce en las células la actividad humana agrícola e industrial. Gracias a los pequeños roedores, que han asumido el papel de bioindicadores en la investigación, el equipo demuestra que las células responden con más énfasis al estrés que producen las sustancias nocivas.
Rombophryneornata adopta su nombre por la referencia a su color y por parecer decorada. Se distingue de las demás ranas de su mismo género al presentar una coloración rojiza. / Miguel Vences
En el macizo del Tsaratanana, la montaña más alta de Madagascar y una de las zonas más remotas de la isla, viven numerosas especies endémicas, pero, por el difícil acceso a esta zona boscosa, la mayoría de ellas son aún desconocidas para la ciencia. Sin embargo, gracias a una expedición europea, un grupo de científicos ha descubierto, entre otras, dos nuevas especies de ranas muy esquivas que viven en el suelo de la selva.
Científicos británicos han diseñado por primera vez unas gafas especiales –con una lente azul y otra verde– a unas mantis religiosas, protagonistas esta semana de nuestro #Cienciaalobestia. Los resultados confirman que este invertebrado usa una percepción visual en tres dimensiones para cazar con eficacia.
Reconstrucción de dinosaurios durante su actividad de exhibición sexual. / Ilustración de Lida Xing y Yujiang Han
El estudio demuestra que pequeñas aves como el lúgano (Carduelis spinus) tienen un carácter social y son capaces de desplazarse con el mismo grupo durante varios años y recorriendo distancias de varios cientos de kilómetros. / EOL
Tiburón leopardo (Triakis semifasciata) seguido durante el estudio. / Kyle McBurnie
Un Spinosaurus se alimentan de peces en el Sureste de Marruecos hace unos 100 millones de años / Ilustración de Sergey Krasovskiy
Reconstrucción de Ötzi./ Adrie and Alfons Kennis