Un astrofísico español y otro francés han identificado una banda en el rango del infrarrojo que sirve para rastrear la presencia de materia orgánica rica en oxígeno y nitrógeno en los granos de polvo interestelares. Si algún telescopio detecta esa banda se podría confirmar la presencia en el espacio de aminoácidos y otras sustancias precursoras de la vida.
El satélite Explorador del Campo Gravitatorio y de la Circulación Oceánica (GOCE) ha despegado con éxito hoy desde el cosmódromo ruso de Plesetsk, según confirma la Agencia Espacial Europea (ESA) en un comunicado. El lanzamiento estaba previsto para ayer, pero se pospuso debido a una anomalía en la torre de despegue.
El lanzamiento previsto para hoy del satélite GOCE (Explorador del Campo Gravitatorio y Circulación Oceánica) de la Agencia Espacial Europea (ESA) se retrasa hasta mañana debido a “motivos técnicos”. GOCE es la misión más sofisticada jamás diseñada para investigar el campo gravitatorio terrestre y cartografiar la forma de referencia de nuestro planeta, el geoide, con una resolución y precisión sin precedentes.
Un grupo internacional de astrónomos formado por Carlos Carrasco-González y Guillem Anglada del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), y por Luis Felipe Rodríguez y Salvador Curiel de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ha publicado un estudio sobre HL Tau, una estrella muy joven con un disco de gas y polvo inusualmente masivo y brillante, que constituye el escenario idóneo para la búsqueda de planetas en formación.
Un equipo de científicos del Departamento de Astronomía y Astrofísica de la Universitat de València (UV) ha desarrollado la herramienta virtual MASCLET para analizar las propiedades de las galaxias y entender los procesos físicos involucrados en la formación de la estructura del Universo.
Investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) han utilizado una novedosa técnica de observación del espectro electromagnético que permite obtener, por primera vez, información sobre la abundancia de carbono y nitrógeno de manera independiente en las galaxias de tipo elíptico, lo que arroja un foco de luz sobre su nacimiento.
Un equipo internacional de astrofísicos, en el que participan varios grupos de investigación españoles, ha descubierto una fuente de rayos gamma de muy alta energía en la región de las lejanas galaxias 3C 66A y 3C 66B. Esta nueva emisión gamma, observada desde el telescopio MAGIC de La Palma (Canarias), no se ajusta a lo que esperaban encontrar los científicos, que ya han propuesto tres hipótesis para explicar su origen.