Están hambrientos y no tienen comida a su alrededor, por eso viven cerca de los vertederos o migran centenares de kilómetros para encontrar comida. Los osos pardos del noroeste de Turquía, protagonistas de #Cienciaalobestia esta semana, se comportan así como consecuencia de la sobreexplotación de las zonas donde habitan.
En la carrera hacia el descubrimiento de un noveno planeta en nuestro sistema solar, científicos de todo el mundo se afanan en calcular su órbita con las pistas que ofrecen los pequeños cuerpos que se mueven más allá de Neptuno. Ahora astrónomos españoles y de la Universidad de Cambridge han comprobado, con nuevos cálculos, que las órbitas de los seis objetos transneptunianos que han servido de referencia para anunciar la existencia de un Planeta Nueve no son tan estables como se pensaba.
Los seres humanos no son los únicos que comprenden la muerte y que sienten respeto hacia sus familiares fallecidos. Unos investigadores observaron en China a unos monos dorados de nariz chata, protagonistas de #Cienciaalobestia esta semana, que manifestaron muestras de afecto y compasión hacia una hembra moribunda, miembro de su grupo. Hasta ahora, aparte de los grandes simios, no se sabía que otros primates pudieran tener comportamientos de empatía ante la muerte.
La técnica de las serpientes que se camuflan en su entorno no es siempre suficiente, por eso algunas de ellas recurren a un truco aún más sofisticado: disfrazarse de presa –de araña, en este caso– para atrapar mejor a sus propias víctimas, que suelen ser pájaros. Así actúa la víbora cola de araña, protagonista de #Cienciaalobestia, descubierta hace diez años al oeste de Irán. Ahora ha sido observada por primera vez en acción.
El hielo del Ártico se rompe, se separa y se derrite, y con ello el hábitat del oso polar, obligado a recorrer largas distancias a nado y sin descanso para encontrar suelo firme. Un estudio confirma que estos mamíferos, protagonistas de nuestro #CienciaaloBestia, nadan cada vez más por el cambio climático. Destaca el caso de una joven hembra que recorrió más de 400 km en solo nueve días.
En las redes de péndulos conectados se forma un grupo que oscila sincronizado y otro de forma errática, en un estado denominado quimera, pero en un momento colapsa y todos los péndulos oscilan a la vez. Investigadores de la Universidad Pompeu Fabra, junto a colegas de Suiza y Alemania, han descubierto que ese repentino colapso está impulsado por una disminución de la sincronización y, según su modelo matemático, el fenómeno es análogo a lo que ocurre durante los ataques epilépticos.
Las cesáreas son intervenciones relativamente frecuentes en las mujeres embarazadas, pero estas cirugías no lo son tanto en gorilas. Kera, una gorila preñada del zoo de Bristol (Reino Unido), tuvo que ser intervenida de urgencia hace dos semanas por un ginecólogo y profesor de la Universidad de Bristol. La cría, que aún no tiene nombre, se encuentra en buen estado de salud, y es, junto a su madre, la protagonista de la semana en #Cienciaalobestia.
Con pocos meses de edad, el ternero Dudley fue vendido a un rancho para su engorde y posterior sacrificio para la industria cárnica estadounidense. Pero ese no fue su final. La fina cuerda que lo retenía le cortó la circulación y le invalidó el pie de una de las patas traseras, que terminó amputado. Tras varias cirugías, veterinarios de la Universidad de Tennesse han logrado adaptarle una prótesis con la que podrá vivir el resto de su vida en una granja santuario. Es nuestro protagonista de #Cienciaalobestia.
El Premio Nobel de Química 2010 ha recaído en los investigadores de nacionalidad japonesa Akira Suzuki (Mukawa, Japón, 1930) y Ei-ichi Negishi (Changchun, China, 1935), así como en Richard F. Heck (Springfield, EE UU, 1931), autores por separado de tres reacciones químicas que emplean catalizadores de paladio para crear enlaces de carbono-carbono mediante emparejamientos cruzados.
Cuando Charles Darwin publicó El origen de las especies hace 150 años evitó explícitamente discutir sobre el origen de la vida. Este hecho, añadido a la mención al “Creador” en el último párrafo del libro, hizo creer que no quiso pronunciarse sobre el tema. Un equipo internacional liderado por Juli Peretó del Instituto Cavanilles de Valencia desmiente ahora esta creencia y demuestra que el naturalista británico sí explicó en otros documentos cómo pudieron emerger los primeros antepasados.