La cordillera del noreste peninsular es adecuada para hospedar hasta cinco veces más ejemplares de oso pardo de los que hay en la actualidad, según los resultados de una investigación internacional con participación española. El estudio ha identificado las áreas prioritarias para los gestores de la conservación.
Philip Campbell durante el Euroscience Open Forum en Dublín. Imagen: SINC
Un estudio publicado en Science ha desvelado que en las sociedades de termitas, las trabajadoras más viejas llevan a cabo 'misiones suicidas' contra intrusos. Cuando una de estas termitas es atacada por un enemigo, rompe la pared de su cuerpo, matándose a sí misma en el proceso, para lanzar una gota del veneno a las termitas invasoras.
Hasta hace solo unos años, los fondos someros cantábricos escondían verdaderos bosques de grandes algas pardas conocidas como laminarias. Pero el aumento de la temperatura de las aguas las ha arrastrado al borde de la extinción en estas costas y está acarreando múltiples consecuencias sobre el ecosistema, una situación que preocupa a científicos de toda Europa y que una investigadora de la Universidad de Oviedo ha seguido de cerca durante 20 años.
Deterioro de una población de fucus en Asturias. Foto: Chely Fernández.
Trabajos de seguimiento de las poblaciones residuales de laminarias. Foto: José Manuel Rico Ordás