La nueva especie detectada no supone un peligro para los cultivos. Imagen: Antonio España
Por el efecto estético o el rápido crecimiento, tanto particulares como administraciones públicas optan por determinadas especies exóticas para poblar los jardines. Muchas veces, estas son las responsables del aumento de las alergias primaverales o del incremento de su duración entre la población del lugar en el que se ubican.
Los expertos estudian los numerosos vínculos entre el bienestar social y la preservación de los ecosistemas. En la foto, la mosca de las flores (Syrphidae). Imagen: J.L. Cernadas.
Las hembras del escarabajo castaño de la harina tienen más parejas sexuales para compensar su baja diversidad genética. Foto: Lukasz Michalczyk
El informe Ecosistemas y Biodiversidad de España para el Bienestar Humano alerta de que el uso insostenible de los ecosistemas limitará su capacidad de proporcionar servicios básicos a la población. El documento, presentado hoy en Madrid por Teresa Ribera, secretaria de Estado de Cambio Climático, señala la dependencia del bienestar humano en la preservación de los ecosistemas.
Los océanos almacenan carbono de dos maneras, disuelto en el agua y a través de la denominada “bomba biológica”, o conjunto de materia orgánica que se concentra en la superficie oceánica. Según una investigación de la Universidad de Sevilla, esta última juega un papel esencial para amortiguar las concentraciones de CO2 en la atmósfera.
La bacteria Halomonas titanicae, un microorganismo encontrado en el casco del Titanic, es una de las diez especies del 'Top 10' 2011 del International Institute for Species Exploration de la Universidad de Arizona (EE UU), que recoge las nuevas especies descubiertas el año anterior. El genoma completo de este microorganismo ha sido secuenciado en el Servicio General de Investigación (SGI) de Biología de la Universidad de Sevilla.
La correcta identificación de las especies de vectores es esencial para la vigilancia entomológica y para entender la epidemiología de las enfermedades transmitidas por artrópodos, como la enfermedad de la lengua azul. Investigadores del CReSA han descrito en la revista Journal of Medical Entomology diferencias significativas en la forma alar de distintas especies de Culicoides empleando técnicas de morfometría geométrica.
Los cambios adaptativos que sufrieron los tetrápodos en sus medios de locomoción para adaptarse a la vida en tierra firme se han recogido ahora en un libro que aporta una visión complementaria y actualizada. El Museo Nacional de Historia Natural de París se ha encargado de publicalo bajo el título How vertebrats moved onto land.