La mejora de las condiciones ambientales ha permitido la recuperación de la nutria (Lutra lutra).
La Ecología, como toda ciencia, sufre las limitaciones y preconcepciones de sus científicos. Para investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), esto explica que la masiva depredación de semillas en los excrementos de los herbívoros haya pasado hasta ahora inadvertida fuera del trópico.
Uno de los efectos del cambio global es el aumento de CO2 atmosférico. Esto provoca cambios importantes sobre los seres vivos y los ecosistemas. Un estudio, liderado por la Unidad de Ecología Global de CREAF-CSIC, relaciona este fenómeno global con los movimientos de las masas forestales perennifolias, como los bojedales, los encinares o los pinares, en detrimento de las caducifolias, como los hayedos o los robledales.
Un equipo de científicos ha descrito dos crustáceos cladóceros, que podrían ser endémicos de la Península Ibérica, y que se hallaron en dos lagunas, una en la cuenca baja del Guadalquivir y otra en una dehesa de Extremadura. Ambos artrópodos podrían habitar en la actualidad en más regiones del área Mediterránea.
Fernando Rendo, biólogo de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), ha desarrollado herramientas genético-moleculares, con la intención de completar el árbol genealógico de ciertas razas ovinas, bovinas y equinas originarias del País Vasco y Navarra.
Ilustración de los dos nuevos crustáceos.
Los robledales, aunque muy comunes en España, también se enfrentan a ciertas amenazas.